PRESENTACIÓN
La Fundación "Derechos Humanos del Estado Sucre
"Incide" nació como Vicaría Episcopal de Derecho y Justicia en la
Diócesis de Cumaná, por mandato de Mons. Alfredo José Rodríguez Figueroa, el 14
de Abril del año 1989.
En el mes de Febrero del mismo año un acontecimiento de masas
había conmovido el país: los empobrecidos del país, en las ciudades más
importantes, asaltaron los centros comerciales como reacción a las medidas
económicas emanadas del recién estrenado presidente de la República, Carlos
Andrés Pérez, en oposición a las ofertas electorales.
El pueblo sintió sobre sus espaldas, una vez más, una dura carga
que le sometía a un hambre sin remedio. Los Obispos de Venezuela, reunidos en
el mes de Marzo en la Conferencia Episcopal Venezolana, se comprometieron a
crear iniciativas eclesiales dirigidas a solidarizarse con la causa de los más
pobres. El Obispo de Cumaná, Mons. Alfredo J. Rodríguez Figueroa[1],
creó el14 de Abril la Vicaría Episcopal Derecho y Justicia.
El mandato institucional con el que se creó la Vicaría Episcopal
de Cumaná definía como espacio de intervención: todo el territorio de la
Diócesis de Cumaná, coincidente en ese momento geográficamente con el Estado
Sucre.
E123 de noviembre de 1993 nos constituimos como persona jurídica
civil con el nombre de FUNDACION DE DERECHOS HUMANOS DEL ESTADO SUCRE, en la
Oficina Subalterna de Registro Mercantil del Municipio Sucre, Folio Número 22,
Tomo 12.
A los pocos meses de la muerte del Arzobispo Mons. Alfredo
Rodríguez Figueroa, ocurrida en Septiembre del 2001, en acuerdo con el Obispo
Manuel Díaz Sánchez, nombrado como Administrador Apostólico durante la sede
vacante, dejamos de ser institución eclesiástica, sin por ello perder nuestro
sentido de pertenencia eclesial y reafirmando nuestra raíz en el Evangelio.
Al cumplir los quince años, el día 18 de Agosto de 2004, en
reunión de Asamblea, pusimos nombre propio a la Fundación: INCIDE. Así nos
registramos en el Acta N° 8, en fecha 05 de Octubre de 2004, bajo el N° treinta
y uno (31), Folio doscientos seis (206) al folio doscientos doce (212),
Protocolo Primero, Tomo quinto, cuarto trimestre del año 2004
Hoy, al cumplir 20 años, queremos relatar nuestra historia[2].
Aún a sabiendas de que es largo este
recorrido, queremos hacer un esfuerzo por presentar los acontecimientos más
relevantes, en forma muy sencilla y, en la medida de lo posible, de manera
narrativa. La presentamos en la primera parte.
Después, en la segunda parte, presentamos una sencilla
evaluación de impacto, fundamentalmente cualitativa, construida con testimonios
personales que explican por sí mismos las apreciaciones generales cuantitativas
que preceden a los testimonios.
[1] En 1992, la Diócesis fue convertida en Arquidiócesis y Mons.
Alfredo Rodríguez Figueroa fue su primer Arzobispo.
[2] Hacemos una presentación fundamentalmente
muy narrativa, si bien incluyendo de vez en cuando algunos aspectos de
reflexión sobre el camino realizado. Una interpretación crítica de esta
historia la hemos reservado para una próxima publicación